“A Estados Unidos se le acaba la paciencia. Hay que detener inmediatamente este inaceptable derramamiento de sangre", ha manifestado Hillary Clinton sobre la guerra civil que se está desencadenando en Libia.
Se les acaba la paciencia sobre lo que acontece en Libia, sobre hecho ocurrido en un país virtualmente en guerra desde hace 41 años –en donde se han producido unas manifestaciones que distan mucho de ser pacificas, los videos difundidos por los medios de comunicación así lo corroboran-, y aun así es el país que tienen la mayor renta per cápita de la región, un desierto convertido en un prospero país y que ha trabajado significativamente en el desarrollo de la hermandad entre los pueblos africanos… Pero no se les acaba la paciencia con el genocida Israel, que volvió a bombardear la franja la semana pasada, o por el centenar de víctimas de la OTAN en suelo afgano que hay que sumar al escandaloso número de víctimas civiles… No se les agota la paciencia asesinando, día sí y día también, a hombres mujeres y niños en todos sus frentes bélicos; y ninguna emoción respecto a los 100’000 muertos diarios por causas directas del hambre generada por el capitalismo global. Y qué decir de sus cómplices más fieles –la “prensa libre”- quienes maquillan, manipulan, tergiversan y ocultan –como en el caso de las huelga obreras en Wisconsin e Indiana- la información, faltando al sagrado deber de la información veraz y objetiva…
En ese sentido, si observamos la historia, veremos que la confusión inducida por los medios de comunicación son parte elemental, orgánica, de los métodos de lucha de las pseudodemocracia occidentales. Así ocurrió con Nicaragua, así ocurrió con Venezuela y la famosa matanza de civiles –al final fueron francotiradores contratados por la oligarquía-, así ocurre con Cuba…
Tras la cortina está lo de siempre, intereses geopolíticos, petróleo, y dominio imperial...
Evidentemente que la reducción de manifestantes mediante el uso de la fuerza militar no es un método que debe de ser utilizado al efecto, sin embargo atendamos al hecho de que Muammar al-Gaddafi, en su discurso al respecto de la crisis ha manifestado que en ningún momento ha emitido la orden de atacar y dar muerte a los manifestantes…Así pues, no es descabellado que estemos ante un incidente creado expresamente -quién no recuerda el incidente que dieron origen a la guerra de Vietnam, por citar un ejemplo-, cuyo único objetivo sea la ocupación militar de una de las reservas energéticas y de agua fósil (dulce), más grande del planeta…
Parece que los derechos humanos no son iguales en todas partes, ni son para todos; o que la administración Obama ha retomado las tesis del ultraderechista Comité de Santa Fe de la era Reagan, que afirma en uno de sus documentos, literalmente:
“… los derechos humanos, que es un concepto cultural y políticamente relativo que la administración Carter ha utilizado para la intervención a favor de cambio políticos en los países del hemisferio y que ha afectado adversamente la paz, estabilidad y seguridad de la región, tiene que ser abandonado…”
Estemos atentos.
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“El Sandinista debe tener un auténtico espíritu crítico, ya que tal espíritu de crítica constructiva le da consistencia mayor a la unidad y contribuye a su fortalecimiento y continuidad, entendiéndose que una crítica mal entendida que expone la unidad, pierde su sentido revolucionario y adquiere un carácter reaccionario.”
Comandante Carlos Fonseca Amador.
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