La dirección estratégica del presidente Ortega en acuerdo UE-Centroamérica demuestra fortalecimiento del papel de Nicaragua en el contexto regional

El líder del Frente Sandinista, Daniel Ortega, fue el guía de cada paso dado por nuestros negociadores. Los resultados han sido de alta trascendencia histórica. Nicaragua fue el único país que incorporó a la empresa privada en las negociaciones

23 de mayo de 2010 http://www.lavozdelsandinismo.com/

El fortalecimiento del papel de Nicaragua en el contexto regional es, sin duda, uno de los resultados más visibles de los Acuerdos entre la Unión Europea y Centroamérica, que ya son una realidad y ofrecen un rostro más cercano a las necesidades de intercambio entre ambas regiones.
Después de la intervención del comandante Daniel Ortega Saavedra este viernes, al reseñar los resultados de las tratativas, quedó claro que la actitud asumida por el presidente, y su papel en todo lo relacionado con los acuerdos, afianzan la posición de la nación.
Y no es retórica lo que decimos. Ha sido de tanta trascendencia su participación en cada momento, que una autoridad como Mendel Goldstein, delegado de la Unión Europea (UE) para Centroamérica, envió una felicitación a Daniel en particular y a toda la misión negociadora nicaragüense, en general, valorando el funcionario europeo, según sus palabras, a un equipo profesional que defiende muy bien las posiciones de su país y tiene gran capacidad técnica.
Los elogios al líder del Frente Sandinista de Liberación Nacional tienen un fundamento bien sólido, pues no es menos cierto que su posición, como también reconoció el delegado europeo, ayudó a abrir caminos en un contexto muy complicado, por lo que dijo que "han hecho un gran trabajo bajo la dirección de las estrategias que usted, señor presidente, ha formado" y reconoció en el equipo negociador de Nicaragua y en Daniel, su visión integracionista.
Y precisamente esa visión y el intenso trabajo de equipo que se realizó, de verdadera convicción nacional, fue reconocida por Daniel, quien señaló que negociar por Nicaragua con una visión estratégica de país y con la participación del sector privado ha sido un paso muy importante.
Cualquier análisis de estos resultados, tampoco puede desconocer el largo alcance que tuvo el gobierno al incorporar a la empresa privada a esos intercambios, convirtiéndose Nicaragua en el único país que tomó tal decisión.
Así fue reconocido por el presidente del Consejo Superior de la Empresa Privada, (COSEP), José Adán Aguerri, al destacar en sus declaraciones que el 19 de mayo (fecha de la firma de los acuerdos) se convirtió en un día de enorme trascendencia histórica para el país.
Para el empresario, tener acceso a estos mecanismos económico-financieros permitirá desarrollar la infraestructura que permita a su vez generar empleo y la productividad que nuestra región necesita.
Aguerri fue preciso cuando señaló que este es un acuerdo que dentro de 5, 10, 15, 25, 50 años va estar allí y ese es un primer gran esfuerzo, un primer gran resultado que se da, de haber encontrado esa firma finalmente entre ambas regiones.
Reconoció, además, el compromiso asumido por Nicaragua con la integración centroamericana.

La región integrada
Los intereses integracionistas de toda la región fueron defendidos igualmente por la delegación nicaragüense, que - encabezada en España por el compañero Orlando Solórzano, ministro de Fomento, Industria y Comercio (MIFIC) y dirigida en cada momento desde el país por Daniel - cumplió su papel dignamente en cada ocasión.
Fue una dirección estratégica; en comunicación telefónica permanente, donde recibimos orientación de Daniel sobre cómo conducirnos en ese proceso final que fue muy difícil; pero afortunadamente llegamos a feliz término, dijo Solórzano.
Allí trabajó nuestro gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional, con el sector privado. Y no solamente podemos decir que consultó, sino que fue un proceso de consulta enorme, tres años negociando y consultando a través de todos los medios y a través de reuniones que hicimos con diferentes sectores, recordó del ministro, quien se siente complacido de la nueva etapa que se abre en las relaciones entre las dos áreas geográficas.